Consejos para preparar un pollo General Tso perfecto
Se acerca el Año del Dragón, y seguimos rindiendo un homenaje con recetas de origen chino, la primera fue el Pollo con almendras, y en el caso de hoy os traigo una que más bien es chino-estadounidense; se trata del Pollo General Tso.
Si queréis hacer las dos recetas os recomiendo que compréis un pollo no muy grande; así podréis aprovechar las pechugas, los muslos y contramuslos para los platos y el resto para preparar el caldo necesario para ambas recetas.
Se dice que el creador de esta receta es Peng Chang-Kuei, un chef nacido en Hunan, China que tuvo que huir a Taiwán, donde en 1949 creó la receta. Posteriormente se trasladó a los Estados Unidos y a finales de los 70 abrió un restaurante donde adaptó esta receta a los gustos occidentales haciéndola menos picante y más dulce.
El nombre de esta receta rinde homenaje al general chino del siglo XIX, Zuo Zongtang, aunque no hay evidencia clara de que tenga alguna conexión directa con él.
El Pollo General Tso destaca por la combinación de pollo crujiente y salsa agridulce, y normalmente se sirve acompañado de arroz blanco.
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Cómo preparar Pollo General Tso. Sigue paso a paso esta receta inspirada en la cocina China.
- 2 contramuslos de pollo (o pechugas)
- 10 ml aceite de sésamo
- 1 clara de huevo
- 10 ml salsa de soja (moreno)
- 1 tbsp miel
- 10 ml vinagre de arroz
- harina de maíz
- 1 tsp levadura en polvo
- 2 huevos
- aceite de girasol
- 3 clove ajo
- 1 cebolla tierna
- 2 guindillas
- 2 tbsp azúcar moreno
- 1 ml jengibre (en polvo o fresco rallado)
- 60 ml salsa de soja
- 20 ml salsa hoisin (o teriyaki)
- 20 ml aceite de sésamo
- 250 ml caldo de pollo (+ jugo del macerado)
- 1 tbsp harina de maíz
- semillas de sésamo
Cortamos el pollo en tacos, lo ponemos en un bol con el aceite de sésamo, la clara de huevo bien batida, la salsa de soja, la miel y el vinagre de arroz. Lo dejamos en la nevera un mínimo de media hora.
Escurrimos el pollo y lo pasamos primero por una mezcla de harina con la levadura y luego por el huevo.
Lo freímos en una sartén con aceite de girasol bien caliente hasta que estén dorados.
Retiramos y colocamos sobre papel absorbente.
Picamos finamente el ajo, la cebolla y las guindillas.
Los salteamos con el aceite de sésamo e incorporamos el azúcar moreno y el jengibre.
Cuando esté dorado incorporamos una cucharada de harina de maíz disuelta en agua, la salsa de soja, la salsa hoisin o teriyaki, el caldo de pollo y el jugo de macerar el pollo.
Cocemos hasta que espese la salsa y añadimos el pollo.
Removemos con cuidado y servimos con semillas de sésamo y arroz blanco.